Fractura tras un reemplazo de rodilla

Las fracturas tras una cirugía de reemplazo de rodilla, aunque raras, son una complicación grave que puede afectar significativamente la recuperación y la movilidad. Una fractura periprotésica, que ocurre alrededor de la articulación protésica de la rodilla, puede ocurrir durante o después de la cirugía, a menudo como resultado de un traumatismo o huesos debilitados. Esta guía explica las causas, síntomas y opciones de tratamiento para las fracturas que ocurren tras una cirugía de reemplazo de rodilla, con el objetivo de ayudarte a entender cómo se gestionan y qué puedes esperar de la recuperación.

¿Qué frecuencia tiene y quién la padece? (Epidemiología)

Las fracturas tras una cirugía de reemplazo de rodilla son poco frecuentes, pero más probables en ciertas poblaciones de pacientes. Los adultos mayores con huesos debilitados, especialmente aquellos con osteoporosis, tienen un mayor riesgo. Además, las personas con artritis reumatoide, antecedentes de cirugías previas de rodilla o quienes están tomando tratamientos prolongados con esteroides pueden tener un mayor riesgo de fracturas periprotésicas. Aunque las fracturas pueden ocurrir en cualquier momento tras la cirugía, son más frecuentes en pacientes que sufren una caída o un traumatismo.

Por qué ocurre – Causas (Etiología y Fisiopatología)

Las fracturas periprotésicas suelen ocurrir cuando los huesos alrededor de la articulación de la rodilla se debilitan debido a diversos factores, entre ellos:

  • Osteoporosis: Una afección que hace que los huesos se debiliten y se vuelvan frágiles, aumentando el riesgo de fracturas.
  • Traumatismos: Una caída u otro trauma físico puede ejercer estrés sobre la articulación protésica y provocar fracturas, especialmente si los huesos alrededor del implante ya están debilitados.
  • Aflojamiento o desalineación del implante: Si los componentes protésicos se aflojan o no se alinean correctamente durante la cirugía, puede aumentar el riesgo de fracturas en el hueso circundante.
  • Enfermedades inflamatorias: Afecciones como la artritis reumatoide pueden provocar adelgazamiento óseo y aumentar el riesgo de fracturas.
  • Desalineación o estrés en la rodilla: La desalineación de los componentes de la rodilla o el esfuerzo excesivo sobre la articulación pueden causar fracturas con el tiempo.

¿Cómo funciona normalmente una parte del cuerpo? (Anatomía relevante)

La articulación de la rodilla es una articulación articulada de bisagra formada por el fémur (hueso del muslo), la tibia (hueso de la espinilla) y la rótula (rótula). El fémur y la tibia están cubiertos con cartílago articular para permitir un movimiento suave, y la rótula se desliza sobre la superficie femoral. La cirugía de reemplazo de rodilla consiste en retirar las partes dañadas de estos huesos y reemplazarlas por componentes protésicos. Estos componentes protésicos se fijan con cemento óseo (cementados) o se insertan a presión en el hueso (sin cemento), y restauran la función y movilidad de la articulación de la rodilla.

Lo que puedes sentir – Síntomas (presentación clínica)

El principal síntoma de una fractura tras un reemplazo de rodilla es el dolor, que puede ser repentino o desarrollarse con el tiempo. Otros síntomas incluyen:

  • Dolor: Dolor persistente o que empeora la rodilla, especialmente tras actividad física o traumatismos.
  • Hinchazón: Hinchazón o acumulación de líquido alrededor de la articulación de la rodilla, especialmente tras el movimiento o actividades con carga de peso.
  • Inestabilidad: Sensación de que la rodilla está débil o cede, dificultando caminar o mantenerse de pie.
  • Dificultad para moverse: La incapacidad de doblar o estirar completamente la rodilla, a menudo debido al dolor o bloqueos mecánicos causados por la fractura.
  • Sonido audible: Puede que escuches un crujido o un chasquido en el momento de la fractura, especialmente tras una caída o un movimiento brusco.

¿Cómo encuentran el problema los médicos? (Diagnóstico e imagen)

El diagnóstico comienza con un examen físico para evaluar la estabilidad de la rodilla, la alineación y los signos de inflamación. Las pruebas de imagen incluyen:

  • Radiografías: Son las herramientas de imagen de primera línea utilizadas para detectar fracturas, mala posición del implante o aflojamiento.
  • Resonancia magnética o tomografía: Estas pueden utilizarse para evaluar daños en tejidos blandos, alineación articular e identificar cualquier daño en el hueso alrededor de la prótesis.
  • Escáneres óseas: En algunos casos, una gammagrafía ósea puede ayudar a identificar fracturas o signos de infección.
  •  

Radiografía que muestra un reemplazo total de rodilla.

Radiografía que muestra un reemplazo total de rodilla.

Clasificación

Las fracturas alrededor de la rodilla tras la cirugía pueden clasificarse según su ubicación y gravedad:

  • Fracturas periprotésicas femorales: Estas fracturas ocurren en el fémur, ya sea por encima o por debajo del componente femoral. Son más frecuentes durante o inmediatamente después de la cirugía.
  • Fracturas periprotésicas tibiales: Estas ocurren en la tibia, a menudo como resultado de una desalineación o debilidad ósea preexistente.
  • Fracturas periprotésicas rotulianas: Estas fracturas ocurren en la rótula, a menudo debido a lesiones intraoperatorias o problemas con la resurrección de la rótula.

Fracturas periprotésicas femorales

La fractura en la parte interna del extremo inferior del fémur (cóndilo femoral medial) ocurre principalmente durante la cirugía. El manejo de las fracturas periprotésicas del fémur depende de la ubicación de la fractura y de la estabilidad de la prótesis.

Las fracturas periprotésicas estables no desplazadas pueden tratarse con métodos no quirúrgicos como férulas o enyesado. Las fracturas por encima de la prótesis con una prótesis estable pueden repararse con un clavo o una placa metálica que se fija con tornillos.

Un componente femoral suelto se maneja con una revisión que involucra un componente femoral con un tallo largo. Raramente, una fractura extensa en personas mayores puede requerir la sustitución de todo el extremo inferior del fémur (reemplazo distal del fémur).

Fracturas periprotésicas tibiales

Las fracturas tibiales ocurren con mayor frecuencia debido a componentes desalineados o en pacientes con antecedentes de cirugía tibial. El tratamiento no quirúrgico en forma de férulas o yesos puede realizarse para fracturas estables no desplazadas. Las fracturas inestables con una prótesis estable pueden tratarse con placas, cables, alambres, etc. Las fracturas con prótesis inestable se revisan, normalmente con una prótesis de vástago largo.

Fracturas periprotésicas rotulianas

Las fracturas de rótula (rótula) son comunes en casos en los que la rótula se recubre con un componente protésico plástico. Las fracturas de rótula ocurren comúnmente debido a técnicas quirúrgicas intraoperatorias. El daño al suministro sanguíneo de la rótula puede provocar la muerte del hueso rotuliano y la posterior fractura.

El resurfacing irregular de la rótula, el grosor inapropiado de la rótula residual y el uso de implantes de clavija única se han asociado con fracturas periprotésicas rotulianas.

Implantes intraoperatorios e instrumentos utilizados en cirugía de revisión de rodilla.

Implantes intraoperatorios e instrumentos utilizados en cirugía de revisión de rodilla.

Las fracturas de rótula que pueden alterar el mecanismo extensor (la capacidad de levantar una pierna recta) o con una prótesis inestable se gestionan mediante tratamiento quirúrgico. El tratamiento quirúrgico puede consistir en la extirpación de la rótula, fijación de alambre, extirpación parcial de la rótula, revisión de la prótesis, etc.

Las fracturas estables pueden corregirse con métodos no quirúrgicos como el yeso o el uso de férulas. Los pacientes con fracturas periprotésicas de rótula pueden quejarse solo de dolor leve delante de la rodilla, en comparación con fracturas periprotésicas tibiales o femorales, donde el dolor es intenso, lo que lleva a una visita a urgencias.

Otros problemas que pueden parecer similares (diagnóstico diferencial)

Varias condiciones pueden causar síntomas similares a fracturas periprotésicas, entre ellos:

  • Aflojamiento del implante: Si el implante se afloja, puede causar dolor e inestabilidad en la rodilla.
  • Infección: Una infección en la articulación de la rodilla puede causar hinchazón, calor y dolor, similar a los síntomas de una fractura.
  • Lesión de ligamentos de rodilla: Las roturas en ligamentos como el LCA o el LCP pueden causar inestabilidad y dolor.
  • Desgarros meniscales: Los desgarros en el cartílago de la rodilla pueden causar dolor, inestabilidad y un rango de movimiento limitado.

Opciones de tratamiento

Cuidados no quirúrgicos

En casos de fracturas estables y no desplazadas, el tratamiento conservador puede ser suficiente:

  • Aparatos: Una rodillera puede ayudar a inmovilizar la articulación y promover la curación.
  • Descanso y modificación de actividades: Reducir las actividades con carga de peso y dar tiempo a la rodilla para curarse puede prevenir lesiones mayores.
  • Manejo del dolor: Los analgésicos de venta libre, como el paracetamol o los AINEs, pueden ayudar a controlar el dolor y la inflamación.
  • Fisioterapia: Una vez estabilizada la fractura, la fisioterapia puede ayudar a restaurar la función y la fuerza de la rodilla.

Atención quirúrgica

En fracturas más graves o desplazadas, puede ser necesaria una cirugía para realinear y estabilizar el hueso:

  • Fijación interna: Se pueden usar tornillos, placas o varillas para asegurar el hueso fracturado y restaurar la alineación.
  • Cirugía de revisión: Si el implante está flojo o desalineado, puede ser necesaria una cirugía de revisión para reemplazar o reposicionar los componentes protésicos. En algunos casos, se pueden usar prótesis de tallo largo para una mejor fijación.
  • Cirugía de fractura rotuliana: En casos de fracturas rotulianas, la cirugía puede implicar la extracción de fragmentos dañados, el uso de tornillos para fijar o la revisión del componente rotuliano.

Recuperación y rehabilitación

La recuperación depende del tipo y gravedad de la fractura y del tratamiento que se proporcione:

  • Descanso y protección: Inicialmente, la rodilla deberá protegerse con una férula o escayola para permitir la curación. El estado de carga dependerá del tipo de fractura y del tratamiento.
  • Fisioterapia: Una vez que la fractura ha sanado, la fisioterapia ayudará a recuperar fuerza, rango de movimiento y estabilidad en la rodilla.
  • Atención de seguimiento: Las visitas regulares de seguimiento con tu cirujano ortopédico garantizarán una cicatrización adecuada y la eficacia del tratamiento.

Posibles riesgos o efectos secundarios (complicaciones)

Las posibles complicaciones del tratamiento de fracturas periprotésicas incluyen:

  • Infección: Como en cualquier procedimiento quirúrgico, existe el riesgo de infección, especialmente en las cirugías de revisión.
  • Coágulos sanguíneos: Puede producirse trombosis venosa profunda (TVP), que requiere medicamentos anticoagulantes.
  • No unionista: En algunos casos, el hueso puede no cicatrizar correctamente, requiriendo una intervención quirúrgica adicional.
  • Fallo del implante: Los componentes protésicos pueden aflojarse o volverse inestables con el tiempo, lo que requiere cirugía adicional.

Perspectivas a largo plazo (pronóstico)

El pronóstico para fracturas periprotésicas depende de la localización, gravedad y tipo de tratamiento. Las fracturas no desplazadas suelen curar bien con un manejo conservador, mientras que las fracturas más graves pueden requerir cirugía y un periodo de recuperación más largo. Con un tratamiento y rehabilitación adecuados, la mayoría de los pacientes recuperan la función y movilidad completa de la rodilla.

Gastos de bolsillo

Medicare

Código CPT 27506 – Fijación interna (fijación por fractura de fémur): 316,79 $
Código CPT 27507 – Fijación interna (fijación por fractura de tibia): 229,27 $
Código CPT 27511 – Fijación interna (fijación por fractura de fémur con placa y tornillos): $235.04
Código CPT 27513 – Fijación interna (fijación por fractura de tibia con placa y tornillos): 290,88 $
Código CPT 27487 – Revisión Reemplazo Total de Rodilla (Femoral + Componentes Tibiales): $413,16
Código CPT 27524 – Cirugía de fractura rotuliana (ORIF rótula): 179,85 $
Código CPT 27486 – Revisión del componente patuliano: $332.04

Bajo Medicare, el 80% del importe aprobado para estos procedimientos está cubierto una vez que se ha alcanzado tu franquicia anual. El 20% restante suele ser responsabilidad del paciente. Los planes de seguro complementarios —como Medigap, AARP o Blue Cross Blue Shield— generalmente cubren este 20%, lo que significa que la mayoría de los pacientes tendrán pocos o ningún gasto de bolsillo por cirugías aprobadas por Medicare. Estos planes complementarios trabajan directamente con Medicare para garantizar una cobertura completa del procedimiento.

Si tienes un seguro secundario —como cobertura basada en el empleador, TRICARE o la Administración de Salud de Veteranos (VHA)— actúa como pagador secundario una vez que Medicare tramite la reclamación. Una vez que se cumpla tu franquicia, estos planes secundarios pueden cubrir cualquier saldo restante, incluyendo coseguros o cualquier cargo no cubierto. Los planes secundarios suelen tener una franquicia modesta, que oscila entre 100 y 300 dólares, dependiendo de la póliza específica y el estado de la red.

Compensación por Trabajadores
Si tu fractura de fémur, tibia o rótula, o cirugía de rodilla está relacionada con el trabajo, la Compensación Laboral cubrirá completamente todos los costes relacionados con el tratamiento, incluyendo cirugía, hospitalización y rehabilitación. No tendrás gastos de bolsillo bajo una reclamación aceptada de compensación laboral.

Seguro sin culpa
Si tu fractura o lesión de rodilla es resultado de un accidente de tráfico, el Seguro Sin Culpa cubrirá todos los gastos médicos y quirúrgicos, incluyendo la fijación de fracturas y las cirugías de reemplazo de rodilla. El único coste posible de tu bolsillo puede ser una pequeña franquicia, dependiendo de los términos de tu póliza individual.

Ejemplo
Emily, una paciente de 59 años con fractura de fémur, necesitó una cirugía de fijación interna (CPT 27506) y posteriormente necesitó una revisión de reemplazo total de rodilla (CPT 27487) debido a la artritis. Sus costes estimados de bolsillo de Medicare fueron de 316,79 dólares para la fijación de la fractura de fémur y 413,16 dólares para la revisión del reemplazo de rodilla. Como Emily tenía seguro suplementario a través de Blue Cross Blue Shield, el 20% que Medicare no cubría se pagó íntegramente, dejándola sin gastos de bolsillo para las cirugías.

Preguntas más frecuentes (FAQ)

Q. ¿Qué causa las fracturas tras una cirugía de reemplazo de rodilla?
R. Las fracturas tras un reemplazo de rodilla suelen ser causadas por huesos debilitados, traumatismos, aflojamiento del implante o desalineación de los componentes protésicos.

Q. ¿Cómo se trata una fractura tras un reemplazo de rodilla?
R. Las opciones de tratamiento dependen de la gravedad de la fractura. Las fracturas no desplazadas pueden tratarse con férulas y reposo, mientras que las fracturas desplazadas pueden requerir cirugía para realinear y estabilizar el hueso.

Q. ¿Cuáles son los riesgos de fracturas tras una prótesis de rodilla?
R. Los riesgos incluyen tardío en la cicatrización, infecciones, fallo del implante y la necesidad de cirugía de revisión.

Resumen y conclusiones

Las fracturas tras una cirugía de reemplazo de rodilla, aunque son raras, son una complicación grave que puede afectar a la recuperación y a la función articular. El diagnóstico y tratamiento oportunos, ya sea quirúrgico o no quirúrgico, son esenciales para una recuperación óptima. La mayoría de los pacientes pueden recuperar la función de la rodilla y volver a las actividades diarias con el cuidado y rehabilitación adecuados.

Perspectiva clínica y hallazgos recientes

Un estudio reciente examinó las causas y el manejo de fracturas periprotésicas tras la cirugía de reemplazo de rodilla. La revisión encontró que estas fracturas pueden deberse a diversos factores, incluyendo debilitamiento óseo por condiciones como osteoporosis, traumatismo o desalineación del implante.

Las opciones de tratamiento varían según el tipo de fractura y la estabilidad del implante de rodilla. Para fracturas no desplazadas, tratamientos no quirúrgicos como el uso de férulas y el enyesado pueden ser suficientes, mientras que las fracturas más complejas, especialmente aquellas que implican implantes flojos, suelen requerir cirugía de revisión.

El estudio destacó que las fracturas femorales y tibiales suelen tratarse con técnicas quirúrgicas como el placaje, mientras que las fracturas rotulianas pueden implicar la extracción o fijación de la rótula. Los resultados subrayan la importancia de la detección precoz y el manejo adecuado para garantizar resultados óptimos. («Estudio de fracturas periprotésicas de rodilla – véase PubMed.«)

¿Quién realiza este tratamiento? (Especialistas y equipo implicado)

Los cirujanos ortopédicos especializados en prótesis articulares, incluidas las cirugías de revisión, son responsables de diagnosticar y tratar fracturas periprotésicas. Los fisioterapeutas desempeñan un papel crucial en la rehabilitación y la recuperación.

¿Cuándo acudir a un especialista?

Si experimentas dolor, inestabilidad o dificultad para mover la rodilla tras una cirugía de reemplazo de rodilla, consulta a tu cirujano ortopédico para una evaluación y tratamiento adecuado.

¿Cuándo acudir a urgencias?

Busca atención de urgencias si experimentas dolor intenso, hinchazón o signos de infección tras una cirugía de rodilla, como fiebre o aumento del enrojecimiento alrededor de la articulación.

¿Cómo es realmente la recuperación?

La recuperación puede durar varios meses, dependiendo de la gravedad de la fractura y del tratamiento necesario. Los pacientes que se someten a cirugía seguirán un plan de rehabilitación para restaurar la función y la fuerza de la rodilla.

¿Qué ocurre si lo ignoras?

Ignorar las fracturas periprotésicas puede provocar un dolor agravado, inestabilidad articular y la necesidad de una cirugía más extensa. La intervención temprana es clave para prevenir complicaciones mayores.

¿Cómo prevenirlo?

Las medidas preventivas incluyen mantener huesos fuertes mediante la dieta y el ejercicio, seguir las instrucciones postquirúrgicas y tomar precauciones para prevenir caídas durante la recuperación.

Nutrición y salud ósea o articular

Una dieta rica en calcio, vitamina D y ácidos grasos omega-3 puede ayudar a fortalecer los huesos y reducir el riesgo de fracturas.

Modificaciones de la actividad y del estilo de vida

Los ejercicios de bajo impacto, el control del peso y las estrategias de prevención de caídas pueden ayudar a mantener la salud de las articulaciones y prevenir futuras fracturas.

¿Tienes más preguntas?

Llámenos

(631) 981-2663

Fax: (212) 203-9223

Dr. Suhirad Khokhar MD

Mi nombre es Dr. Suhirad Khokhar y soy cirujano ortopédico. Obtuve mi título de MBBS (Licenciatura en Medicina y Cirugía) en la Facultad de Medicina del Gobierno de Patiala, India.

Me especializo en trastornos musculoesqueléticos y su tratamiento, y he aprobado y redactado personalmente este contenido.

Mi página de perfil contiene toda mi información académica, experiencia laboral y todas las páginas de este sitio en las que he colaborado.

Programar una cita
D10x